Tiene que ser algo fuerte e inequívoco, como lo que convenció a la comunidad científica de que los meteoritos eran rocas extraterrestres y trozos de hierro. Fue la caída del meteorito en L’Aigle, Francia, en 1803. Obtuvo tanto distinción como procedencia.
Distintividad: grandes cantidades de rocas aparecieron allí, rocas muy parecidas entre sí y no muy parecidas a otras rocas en el área. En resumen, composición anómala.
Procedencia: mucha gente del pueblo lo vio, personas que a menudo no interactuaban mucho entre sí.
- ¿Puedes decirme todo lo que sabes sobre extraterrestres?
- Vi una luz tenue que se movía en el espacio, ¿cuáles son las posibilidades de que fueran extraterrestres?
- ¿Te comunicas con 'seres de otra dimensión' en la iluminación?
- Si nos encontramos con extraterrestres, ¿qué les decimos que son el nombre y el demonio de nuestro planeta?
- ¿Los extraterrestres (ET) y los platillos voladores, los objetos voladores no identificados (OVNI) son solo algo de ciencia ficción?
Uno puede pensar en muchas cosas que satisfarían al menos una de estas condiciones.
Los aterrizajes en lugares como Central Park, Nueva York, se completan con demostraciones de tecnología muy avanzada ante un gran número de testigos.
Un faro en la luna. Podría atraer la atención hacia sí mismo transmitiendo en frecuencias que los terrícolas ya utilizamos. No es muy amigable, pero funcionaría.
Una bolsa de chips de computadora rechazados por las pruebas de control de calidad.